En las parcelas experimentales situadas en las zonas de deflación más prominentes de playa del Inglés se han instalado 51 captadores de arena cuya finalidad será disminuir la velocidad del viento en estos puntos para que el sedimento pueda depositarse tras ellos y formar pequeñas dunas que se irán incorporando paulatinamente al sistema. De esta forma, se consigue por un lado reforzar la primera línea de dunas (que servirá a su vez como protección frente a la erosión del resto del sistema) y por otro regular el aporte de sedimento, ya que si este entra demasiado rápido, la experiencia nos dice que también lo abandonará demasiado pronto.
Dada la condición experimental de la experiencia de instalación de captadores, se comprobará la eficacia de distintos tipos de estructuras de mimbre (circulares y semicirculares) a la hora de captar arena con el fin de determinar cuál es la forma más adecuada para utilizarla en la generación artificial de dunas.
Los captadores de arena que se están utilizando en esta experiencia son unas vallas formadas de material totalmente biodegradable en las que numerosas varillas de mimbre entrelazadas por fibra vegetal se disponen de forma perpendicular al suelo. Estas varillas no pueden estar ni muy unidas ni muy separadas, ya que si forman una superficie demasiado tupida, el viento las rodearía en lugar de atravesarlas erosionando la zona de barlovento y acelerando su velocidad alrededor de la estructura. Si las varillas se dispusiesen demasiado separadas las unas de las otras, el viento pasaría sin alteraciones inutilizando el captador. Es el punto intermedio el que emula el efecto de un arbusto como los balancones y es capaz de formar dunas a sotavento.

Captador de arena semicircular

Captador de arena circular
Para esta experiencia se han delimitado dentro de una importante zona de deflación de playa del Inglés tres parcelas, en dos de las cuales se instalarán tanto captadores de arena circulares como semicirculares (cada uno junto con 2 balancones asociados) y balancones sin captadores para poder comparar el éxito de las diferentes estructuras en incluso evaluar la necesidad de instalar captadores o no. La tercera parcela (situada entre las otras dos) será utilizada como control y en ella no se realizarán acciones de ningún tipo. A la hora de elegir los puntos exactos donde colocar los captadores se ha procurado colocarlos de forma perpendicular a la dirección del viento dominante (NO) y de forma que no interfieran entre ellos.
Cada 15 días se realizará un seguimiento pormenorizado de la arena acumulada por cada captador, además se tomará constancia del estado y tamaño de los balancones recién plantados para evaluar su tasa de éxito a la hora de aclimatarse al nuevo ambiente.


